Hoy, como cada tres meses, el equipo del hospital La Paz ha venido a hacerme el rutinario cambio de cánula a domicilio, protocolo que se implantó durante la pandemia y que, por suerte, se sigue haciendo. Si bien implica cierto riesgo, ya que, ante cualquier complicación, no se tienen los recursos que sí se tienen en el hospital, la comodidad de hacerlo en tu casa, sin tener que ir al hospital e ingresar la noche de antes o la exposición a los mil bichitos de hospital.
Tras los dos últimos cambios, digamos, no muy agradables, hoy fue todo muy bien. También me hicieron unos retoques con bótox, para que mis glándulas salivales no trabajen tanto.
Dado mi nerviosismo, para evitar que me suban mucho las pulsaciones, me tomo un orfidal antes de que lleguen, y el resultado es:
#JuntosVenceremosELA
Eres un grande, Jorge, todo mi apoyo desde Cantabria!
Muchas gracias, un abrazo.